Amada mía, ¡Amor de mis amores!
Siento tus manos trenzadas en las mías,
siento tus dedos cual pétalo de flores,
¡Siento tus besos en dulces armonías!
Amada mía describir mi sentir, es complicado,
complicado como las olas en los mares,
¡Amada mía soy tan feliz al ser amado!
¡Tu eres el cielo! Sin trebejos ni avatares.
Amada mía ¡Mi camino es tu camino!
Los pasos de nosotros son el mismo,
son guiados por las brechas del destino;
Es incongruente su total anacronismo.
Amada mía, perfecta en sincronía,
somos de dos la matemática concisa,
suma perfecta de amor y de alegría,
tiempo perfecto, un minuto en cada día.
¡Más por amarte no pierdo mis sentidos!
Si acaso la cordura al no tenerte,
Esa locura en deseos tan excedidos,
¡El miedo eterno... El miedo de perderte!
¡Que no divague el corazón por distracciones!
¡Amarte diluye... Efímeras quimeras!
Las utopías no se ven por tus acciones,
¡Son tus cariños las cosas verdaderas!
Amada mía ¡No alejes de mis manos;
La tibieza que nace de las tuyas!
El secreto del tesoro en los arcanos,
la tierna caricia en que me arrullas.
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